Aún cuando te vas que no te has ido,
derramando perfume a gotas por la escalera…
Aún cuando te marchas pero te quedas,
venero nuestras caricias y las revivo.
Tus atropellados pasos a nuestra trinchera,
tus delgados dedos en vertiginosas huellas,
tu piel de tosca barba: lija gris y negra,
tus aventurados labios disfrutando mis caderas.
Así te recuerdo, amor, silbando desde la escalera.
Hermosos poema descriptivo sobre un amor maduro y sosegado, pero no exento de pasión...
ResponderEliminarA veces los gestos cotidianos son los que evocan mejores recuerdos...
Un abrazo de abuelete!!!
PD: Cuando entreveo verdad en los poemas que leo no puedo evitar un leve rubor... (Yo y mis pudores)
HOLA GUAPISIMA SOY JUAN , ME A ENCANTADO TIA
ResponderEliminarDE VERDAD QUE ERES LA OSTIA
ESPERO Y DESEO QUE ALGUN DIA RECIBAS LO QUE MERECES QUE ES MUCHISISISISIMO UN BESAZO PARA TI Y PARA MAMA.
de tu carnicero preferido